Queridos hermanos y hermanas en ideal espírita,
Con profundo sentimiento de gratitud y esperanza, nos despedimos de este Congreso Espírita Mundial, un espacio de luz, confraternidad y crecimiento espiritual que nos ha reunido bajo el amparo del ideal codificado por Allan Kardec y vivificado por los ejemplos sublimes del Maestro Jesús.
Desde la Federación Espírita Uruguaya, queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a cada participante, expositor, voluntario y colaborador que hizo posible este encuentro fraterno. Nos han unido la diversidad de naciones, pero nos ha hermanado un mismo propósito: la divulgación responsable y amorosa del Espiritismo, como herramienta de consuelo, esclarecimiento y transformación moral de la humanidad.
Sabemos que el camino es desafiante, pero también sabemos, como nos recuerda el noble espíritu Bezerra de Menezes, que:
“El Espiritismo no es una religión del futuro, sino el futuro de todas las religiones que se fundan en el amor.”
Inspirados por esta verdad luminosa, volvemos ahora a nuestras casas, a nuestros centros, a nuestras comunidades, con el corazón renovado y la voluntad fortalecida para continuar sembrando las semillas del bien, con humildad, estudio y servicio.
Que este Congreso no sea un punto final, sino un punto de partida para nuevas iniciativas, mayor unión entre las instituciones, y una acción espírita cada vez más comprometida con los valores del Evangelio.
Que la paz del Divino Amigo Jesús permanezca con todos, hoy y siempre.
Con fraternal gratitud,
Federación Espírita Uruguaya
Congreso Espírita Mundial
Montevideo, octubre de 2025